viernes, noviembre 05, 2004

SHH!

Shh!, calla, se acerca el momento,
deja que pase, no emitas sonido,
en silencio cuéntame,
qué fué de ese sentimiento.
¿Dónde quedó escondido?...
Ahora, calla y escúchame.

Shh!, ¿ acaso lo entiendes ?,
ese fuerte latido que apaga el silencio
no es tuyo, ni mío
es aquel al que le perteneces.

Shh!, voltea y veme
¿aceptarás mi mano en la tuya?
Calla!, aún no contestes
aún tengo mucho en mente,
solo escucha y ya
lo sabrás, no importa dónde estés.

Shh!, deja que el vació del sonido,
te diga lo que mis labios esconden,
deja que la tinta de mi pluma
te lleve a un mundo desconocido
donde los sueños existen,
déjame, y te llevaré a la cima.

Shh!, ¿te gusta acaso?,
el universo que es tuyo,
que yo creé para tí,
es tuyo ese ocaso,
lo sé, lo trazé yo,
lo supe cuando te perdí.

Shh!, no seques esa lágrima
déjala acariciar tu mejilla,
deja que se despida.
porque a ella le lastima
dejar de ser parte de tu vida.

Shh!, ahora me retiro,
sin tu mano, sin tu mente,
pero con el Universo,
que crece cada que te miro,
ahí estaré yo, como un ente,
deleitado en la pluma,
buscándote en las historias,
esperando paciente.
y tal vez... eternamente.

(Leonardo Uriel Benítez Elizalde)